➤ Volver

Cuando hablamos de suelo pélvico, nos referimos al conjunto de músculos y ligamentos situados en la base de la pelvis. Su función principal es la de sostener los órganos de la parte inferior de la cavidad abdominal, la vejiga, el recto, el útero y la vagina, de manera que se asegura su correcta función.

En ocasiones, la edad, así como el parto y estilo de vida pueden ocasionar daños en el suelo pélvico, que pueden repercutir de una manera importante en nuestro día a día, como pueden ser:

– Dolor.

– Cicatrices por episiotomía o por desgarros durante el parto.

– Pérdidas de orina por esfuerzo o incontinencia urinaria.

– Prolapso (descenso) de los órganos pélvicos.

– Disfunción sexual.

– Distensión y debilidad de la musculatura abdominal (diástasis).

– Estrías…

La electroterapia intracavitaria nos ayuda, junto a la terapia manual y ejercicios activos por parte del paciente, a reparar esos daños, logrando un aumento de la vascularización y oxigenación de los tejidos, un aumento del metabolismo y mejora del trofismo, una estimulación de colágeno y elastina para obtener un retensado del tejido y un reequilibrio del tono muscular.

Cuando hablamos de ejercicios activos nos referimos a los ejercicios de kegel, la gimnasia abdominal hipopresiva, el método propioceptivo 5P y ejercicios de Pilates.

Con la combinación de estas herramientas terapéuticas conseguimos realizar un tratamiento integral adaptado a cada caso, mejorando su calidad de vida.